sábado, 31 de mayo de 2008

Alrededor de un huevo

Llevado por el sabor honesto de un huevo frito, meditaba de nuevo sobre la polémica que estos días atiza nuestros fogones. No teman, que no me ha llevado el huevo tan lejos como las magdalenas. Pensaba en los huevos de Lucio, nunca probados, y en si era más escandaloso cobrar tamaña cantidad de euros por dos simples huevos, o si lo era cobrarla por los experimentos culinarios de laboratorio de un señor que pinta platos con comida. Creo que la respuesta sigue siendo “ambos dos”.

Y recordaba de pronto, tantos años después, las burlas que suscitó en mi casa un cocinero que abogaba por una nueva visión del huevo frito, que separaba la yema, batía la clara a punto de nieve, la hacía a fuego lento en un cazo (la sartén tenía no recuerdo qué inconvenientes), y luego le abría un huequito a aquella especie de merengue salado para devolverle, con mimo exquisito, su yema, que debía hacerse menos. No recuerdo que en aquel reportaje televisivo se usara el término deconstrucción (que el Word no reconoce, y he de insistirle en que no me he equivocado). Deconstrucción temprana de un huevo frito. Burlas domésticas de una España miope que despertaba -también en sus fogones- hacia una España a veces ciega.

Hoy será un respetable anciano en una exitosa academia culinaria, o andará el pobre dando la vara en el asilo, quién sabe, gritándole a tanto papanata que no nació a destiempo y que le tocará ver en la sala donde se reúnen, manta a cuadros sobre las rodillas, de diez a doce y de cuatro a seis, los ojos en el televisor.

La de enzimas y algas inmovilizadas que preparamos Microalgo, yo, y otros colegas, divertidos viendo formarse las esferas perfectas de alginato, sin tan siquiera acordarnos del jugo de melón…

Ahí está el mérito hoy día, en que se te ocurra a tiempo.

martes, 27 de mayo de 2008

Matmos

Murió John Phillip Law. No fue un gran actor pero era bello. El fue Pygar, el ángel ciego de Barbarella, tan hermoso y bien sexuado que nos hizo albergar esperanzas de que la Gloria fuera un lugar tan propicio como el Infierno para el fornicio post-mortem.

Barbarella es una película por la que el tiempo ha pasado de largo sin molestarla. La volví a ver hace no mucho en un pase televisivo y, con todos sus fallos y su falta de mesura, sigue conservando ese encanto mágico. Además, mucha gente ignora que los topónimos y personajes de Barbarella se han utilizado para bautizar proyectos de lo más variado en el ámbito de la cultura pop.

Por ejemplo, el malo de la película se llamaba Duran Duran y dio nombre a la banda que todos conocéis. Menos famosos son Duran Duran Duran, si bien más gamberros, aunque con semejante nombre era como para sospecharlo.

El Matmos, por su parte, era el fluido maligno sobre el que flotaba la ciudad de SoGo (acrónimo de Sodoma y Gomorra). Y Matmos es también un dúo de música electrónica de San Francisco que, precisamente, acaba de editar su último disco, Supreme Balloon, en mi modesta opinión el más completo de su brillante carrera. Un homenaje a los pioneros del género cargado de referencias más o menos evidentes (Wendy Carlos, Cluster, Terry Riley...). Recomendado por los mejores fabricantes de tragaperras.

lunes, 26 de mayo de 2008

Los peores comics del mundo


Ayer domingo se celebró el día del orgullo freak. Según leo en los medios, para conmemorar el estreno de la primera entrega de La guerra de las galaxias, qué cosas. Y aunque un ilustre miembro del staff de El Conciso que enarbola orgulloso la bandera del freakismo a la mínima ocasión se comprometió a publicar algo al respecto, al final pasó el día sin pena ni gloria. De modo que tomo el relevo para evitar que la gente piense que este es un blog serio y militante.

Por ejemplo, con una visita al museo virtual de los peores comics del mundo. Que de todo tiene que haber en la viña del Señor. Hasta un superheroe kosher: Shaloman. Comics educativos, religiosos, publicitarios o directamente absurdos. Mi favorito: "Moises, el hombre que hablaba con las zarzas". Visítenlo y no se pierdan los jocosos comentarios que acompañan cada entrada.

miércoles, 21 de mayo de 2008

Un concejal sensato

Lo último que yo habría imaginado es que desde las páginas de El Conciso acabaríamos alabando la labor de un concejal, pero nobleza obliga. Sobre todo cuando desde todos los medios se le está atacando por tomar una decisión lógica y beneficiosa para su municipio. El concejal es el responsable de fiestas mayores de La Coruña y su nombre Carlos González-Garcés.

La noticia ha sido muy comentada en prensa, con reacciones que han ido de la chacota a la falsa indignación. Este concejal, simplemente, ha descartado que su ayuntamiento vaya a organizar un concierto de Bob Dylan. Y lo ha hecho con argumentos de peso: en sus últimos conciertos Dylan no interpreta ninguna de las canciones por las que es famoso; y además, mantiene una actitud despectiva con el público, toca de espaldas y ni siquiera saluda. Y por si fuera poco, cobra cinco millones de dólares por bolo.

Bien hecho. No se puede emplear el dinero público en financiar actividades que carecen del más mínimo interés sólo para complacer los pésimos gustos del electorado. Porque, aunque sus fans se resistan a reconocerlo, las apreciaciones del concejal sobre los conciertos de Dylan son absolutamente ciertas. Un señor cuya creatividad se evaporó hace más de tres décadas debería limitarse a hacer lo que otros de su quinta: tocar las canciones que le hicieron famoso y la gente quiere oir. Y comportarse en escena educadamente, que para eso le pagan. La actitud chulesca puede admitirse cuando uno está en la cima, no cuando se sale de gira para costearse el geriátrico. Por lo menos, no con nuestro dinero.

viernes, 16 de mayo de 2008

Une ode au toy piano

Un poco de orden, por favor. Que bajo la guardia un par de días y me convierten el blog en una especie de M80. Así que, después de tanto mainstream, se impone un ritual de desagravio con una marcianada de las buenas. Por ejemplo con esta recopilación francesa dedicada, como su nombre indica, al piano de juguete.

El piano de juguete, en contra de lo que se pueda pensar, se ha ganado su derecho a figurar en puesto prominente en la historia de la música del siglo XX. Recordemos tan sólo la famosa Suite for Toy Piano (1948) de John Cage (que les ofrezco al final en versión de Steve Butters). Más cercano a nosotros está el músico francés afincado en Cataluña, Pascal Comelade, que suele emplear este singular instrumento en muchas de sus obras.

La recopilación que nos ocupa fue editada en 2007 por el pequeño sello francés MonsterK7, una discográfica independiente que tiene como característica distribuir sus lanzamientos en cassette, lo cual limita mucho su difusión, al menos entre quienes hemos jubilado ya las pletinas. A pesar de ello la cinta fue un éxito y se agotó la tirada inicial, por lo que MonsterK7 la pone ahora de forma gratuita para su descarga en formato MP3 desde su web:

http://www.monsterk7.com

Se trata de artistas en su mayoría desconocidos, al menos para mí (con excepción de los españoles Pequeña Fiera). Sin embargo el acierto de la recopilación es no centrarse en un estilo y buscar la variedad de los temas, siempre con el común denominador de contar con un piano de juguete. Disfrútenla.


jueves, 15 de mayo de 2008

Bajo la piel

Pues yo sigo los pasos del Duende y también cuelgo una de mis canciones favoritas. En el decimo aniversario de su muerte, va por él y por el swing.


The foggy dew

Todo el mundo cuelga sus perversiones musicales, ¿por qué yo no?



Para mí, tiene el atractivo de ver a la Sinéad sonreír. Y es increíble como una criatura tan saboría puede tener una sonrisa tan brillante.

jueves, 8 de mayo de 2008

Adivina, adivinanza (I)

Ayer me compré por fin una joya que iba rondando desde hace mucho tiempo, y que era una de las ausencias imperdonables de mi biblioteca.

Y hace tiempo que voy pensando que este blog, que debía ser un punto de encuentro para salvar nuestras respectivas distancias (siempre geográficas), se está convirtiendo más en cuatro tristes monólogos, así que les propongo un juego, a la antigua usanza o siguiendo los más estúpidos sistemas de dinamización de grupo, como ustedes prefieran.

Mientras escuchan los sonidos móviles recomendados por el Ilustrador Popular (haciendo honor a su nombre), lean este poema que les copio, y jueguen a adivinar de qué se trata. Si ustedes no lo aciertan, para mi vuelta dentro de dos semanas -y si el avión de LAN no se cae- prometo la aclaración mediante la copia de un texto que les tocará el corazón conciso. Ahí va:

En la cabeza
En el pecho
En el cinturón
Sobre la silla, junto a las piernas
Junto a las rodillas
En la pierna
En el extemo del pie
En el brazo izquierdo
En el cúbito izquierdo
En el cúbito derecho
En el pie de la silla
En medio del respaldo
En el extremo.

Suerte y atención a las pistas. Y abrazos.

Piezas para teléfono móvil

Sasaki San es Mika Sasaki y vive en Shiba, un distrito de Tokyo. No sabemos nada más de ella, ni siquiera tenemos fotos recientes. No ha estudiado música ni toca ningún instrumento. Se sospecha que ni siquiera compra discos. Pero un buen día descubrió que su teléfono móvil disponía de una herramienta para crear tonos de llamada. Y desde entonces no ha parado de componer. Se calcula que tiene ya unas 300 melodías, que forman una suerte de diario sonoro. Su estilo se podría encuadrar dentro del minimalismo electrónico, aunque ese nombre tiene numerosas connotaciones culturales y resulta demasiado complejo para definir algo tan simple.

Hace unos años se editó un disco, Memories of Sasaki San, con remezclas de sus melodías a cargo de músicos de todo el mundo con una sensibilidad similar, entre ellos Steve Roden, Alejandra & Aerón o el barcelonés Un caddie renversé dans l’herbe. Se daba la circunstancia insólita de que disponíamos de remezclas de la obra de una artista que nunca había entrado en un estudio de grabación ni tenía disco propio editado.

Recientemente se ha publicado por fin un disco con las composiciones de Sasaki San, aunque ella sigue sin pisar un estudio. Simplemente cedió su teléfono para que lo pasearan y grabaran las melodías junto con los sonidos ambientales que hubiera en cada momento y lugar. El resultado se llama Return of Sasaki San, y su escucha es muy recomendable y mucho más entretenida de lo que a priori se pudiera pensar.

martes, 6 de mayo de 2008

Luto desteñido

Un psicópata viola y asesina a una niña de seis años.

Una pareja de novios, ocupantes de una cabina de una atracción de feria, mueren al soltarse ésta de su sujeción e impactar con el suelo.

Tres jóvenes que regresaban de un botellón a las seis de la mañana se estrellan con su coche y mueren en el acto.

Una mujer es acuchillada por su ex-marido, sobre el que había una orden de alejamiento.

Casos éstos o similares, cada vez más frecuentes, cuya enumeración en los noticieros suele acabar con la fórmula: "El Ayuntamiento ha decretado tres días de luto oficial". A diario en cualquier ciudad mueren decenas de personas a las que sólo sus familias y amigos les guardan luto. No sé por qué motivo ni desde cuándo se ha impuesto la idea de que si la muerte se produce en trágicas circunstancias (y cuál no lo es) el luto debe tener carácter oficial. La consecuencia es la devaluación de esta solemnidad cívica, que debería estar reservada para catástrofes con un elevado número de víctimas (inundaciones, terremotos) o para cuando fallezca una alta autoridad. Como un ex-presidente de Gobierno. Total, tampoco hay tantos.

sábado, 3 de mayo de 2008

Entrevista a Pániker

Su padre, el filósofo Salvador Pániker, se define como "indocatalán". Agustín Pániker (1959) ríe ante el apunte y no deja de comentar su asombro: "Porque en realidad, mi padre -indica- ha sido siempre muy anglosajón". De hecho, Salvador Pániker sólo estuvo una vez en la India, hace cuarenta años, y no volvió. Agustín Pániker ha visitado varias veces el país y ha escrito varios ensayos imprescindibles para intentar comprender la poliédrica realidad del país de su abuelo.

(La entrevista continúa aquí)