Siguiendo el ejemplo de Robespierre, añado la superstición, cuando no es bello folklore, a la lista de enemigos del espíritu conciso. Recién leo en una conocida y respetable Web de noticias la suposición de que los años bisiestos sean a la vez años siniestros, habida cuenta de ciertas calamidades humanitarias ocurridas en estos años que, no lo olvidemos, no tienen otra función que ajustar groseramente nuestro calendario.
Pero el número de desgracias y de barbaridades ocurridas es por desgracia tan alto, que da para cualquier tipo de año y estadística. Así que menos superstición, y a disfrutar un día que tiene, no cabe duda, un aurea especial. Acaban de decirme que en Inglaterra las mujeres lo aprovechan para pedir la mano. Me imagino el estrés de las pobres ante la perspectiva de tener que esperar otros cuatro años más! Que lo disfruten.
Pero el número de desgracias y de barbaridades ocurridas es por desgracia tan alto, que da para cualquier tipo de año y estadística. Así que menos superstición, y a disfrutar un día que tiene, no cabe duda, un aurea especial. Acaban de decirme que en Inglaterra las mujeres lo aprovechan para pedir la mano. Me imagino el estrés de las pobres ante la perspectiva de tener que esperar otros cuatro años más! Que lo disfruten.
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