lunes, 24 de diciembre de 2007

En torno al solsticio

Estrellas, espirales, coronas, ruedas... la Navidad debería ser la Fiesta de la Rueda: la rueda que gira, el sol que parte para después volver, las tradiciones que se repiten y son siempre las mismas y siempre distintas, el tiempo que se muerde la cola, como una anguila.

Muchas de las costumbres presentes en el Solsticio de Invierno provienen de historias que hablan de una batalla entre la oscuridad y la luz. Otras tradiciones señalan esta época como la del nacimiento de un salvador -el Niño Sol-.

El retorno de la luz es el gran protagonista de las fiestas de esta época. En Suecia, lo celebran el día de Santa Lucía. Los judíos festejan el Hannukah, la fiesta de las luces. La cristiana corona de Adviento, de la que hay que encender una vela cada domingo antes del día 25, es otra forma de 'llamar' a la luz. Similares costumbres rodean al Tronco de Navidad.

Otra tradición extendida ha sido siempre decorar con plantas perennes: hiedra, acebo, muérdago, romero... ¿y qué otra cosa es, si no, el árbol de Navidad?

domingo, 23 de diciembre de 2007

El edificio gótico

Disculpen que rompa la racha navideña del blog, pero como herederos que somos de los doceañistas una de nuestras preocupaciones debe ser el regeneracionismo nacional y reflexionar sobre el unamuniano “Nos duele España”. Además, mejor escribir ahora el post ante la avalancha de ocio que se nos viene y que puede hacer que esta idea caiga en el olvido.

Viene a colación todo esto porque estoy leyendo los dos ensayos que Stendhal dedicó a Napoleón y que bajo este título han sido editados por Verticales de Bolsillo. De paso les diré que no son muy interesantes, pues forman parte de esta discutible manía de editarlo todo de los grandes nombres aunque no estén en condiciones. Los dos manuscritos de Stendhal no pasaron de ser borradores inconclusos, lo que se nota demasiado en su lectura. El primero de ellos, Vida de Napoleón, lo empezó poco después de la caída del corso en Waterloo, pero las circunstancias políticas aconsejaron dejarlo en el cajón. El escritor, que había sido funcionario de la administración imperial, no tenía interés en acabar enchironado por bonapartista cual Edmundo Dantes. El segundo, Memorias sobre Napoleón, lo inició veinte años después, tras haber dado sus obras maestras al mundo, pero también lo abandonó. Ambos trabajos se convirtieron el la típica sorpresa póstuma que se lleva alguien escudriñando los papeles del difunto.

Pero a lo que iba, que como de costumbre me voy por las ramas. En el primer ensayo, que es por donde aún voy, Stendhal dedica bastante espacio a la guerra en España, sin poder ocultar su asombro europeo ante un pueblo que fue capaz de tener en jaque a la Grande Armée del emperador. En sus páginas se cita una carta que el político afrancesado Mariano Luis de Urquijo, uno de los puntales de la corte del rey José, escribió al general Cuesta. Sus palabras escritas hace casi 200 años, suenan muy actuales, y demuestran que efectivamente no hay nada nuevo bajo el sol. Les dejo con ellas.

“Por desgracia, desde Carlos V, la nación ya no existe, porque no hay en absoluto, de forma real, un cuerpo que la represente, ni un interés común que la una en la consecución de un mismo objetivo. Nuestra España es un edifico gótico compuesto por piezas y fragmentos con casi tantos privilegios, legislaciones, costumbres e intereses como provincias hay. El espíritu público no existe en absoluto”.

sábado, 22 de diciembre de 2007

Fun, Fun, Fun


La cuestión es que El Ilustrador tiene razón. Adoro la Navidad. Me gusta todo de ella, incluso lo que me irrita. Es lo que tienen los duendes: les ponen unas cuantas lucecitas, unos cascabeles sonando, algún que otro copo de nieve con compás de pluma... y ya está. Perdido. La Navidad como AtrapaDuendes gigante.
Me gustan los roscos de vino y las luces de hada y las estrellas brillantes. Atesoro -desde que era pequeña duende- una ingente cantidad de libros y revistas que hablan tanto del solsticio hiemal y el culto al muérdago como de la mejor manera de meterle ciruelas por el culo a un pavo, queridas. Ya ven, duendina buena, duendina diligente.
Incluso me divierte la parte chirrihiriente, la de regalos insufriblemente horteras y familiares desquiciados olvidando la bolsa con los langostinos en el tren. Me fascina la naturaleza humana, tan mezquina que ha sido de capaz de convertir una fecha dedicada al juego, la gratitud y la esperanza en una ordalía de egoísmo salvaje.

Ya les iré ilustrando en los días venideros -confirmando a sus ojos la afirmación de nuestro amigo-. Por ahora, me limito a acudir en su socorro: si los compromisos sociales amenazan con dinamitarle su plan navideño -que no debería ir mucho más allá de la zampa, el bebercio, la tele y las entreñables conversaciones con aquellos que nos han perdonado tantas cosas- aquí tienen esta ayuda.

(Cojan el diccionario de inglés, just in case)

Besos.

Que los Niños lo canten bien.

viernes, 21 de diciembre de 2007

En estas fechas tan señaladas...

Para el Duende de los Cafés, que todavía cree en los Reyes Magos.

Una apología de una tradición cristiana en un blog que lleva por bandera la ilustración y el racionalismo? Y por qué no? Seamos frívolos por un día. De hecho podríamos empezar este post como el famoso sketch de La Vida de Brian:

- Porque, a ver, qué es lo que nos ha traído la religión?
- Bueno... el arte...
- Vale, pero dejando aparte el arte?
- Los mitos...
- Bien, bien, pero además del arte y los mitos?
- Las fiestas!

Realmente las fiestas son la gran aportación de las religiones a la civilización. Y en nuestra cultura occidental la Navidad, incluso centrándonos tan sólo en el punto de vista mitológico, tiene todos los ingredientes para triunfar. Anunciación por un ser celestial a una virgen del nacimiento de un dios; viaje hacia el lugar sagrado previsto en las profecías; dificultades que superar... El rechazo de la población bienpensante y el nacimiento del niño entre animales son motivos literarios enormes. Añádase el reconocimiento de la divinidad por los pastores, tan acostumbrados ellos a la presencia de deidades silvestres, la adoración de los sabios extranjeros y la persecución por un cruel rey que ve peligrar su legitimidad. Hasta el más lerdo de los productores cinematográficos empeñaría su fortuna si le ofrecieran una historia así.

A lo largo de siglos de religión oficial el mito se ha ido rodeando de ritos: Los más grandes compositores de nuestra tradición han creado obras musicales sublimes que conviven en armonía con las canciones populares que entona el vulgo. Hay unas comidas y unas bebidas propias de las fechas, particulares además para cada comunidad geográfica, que se consumen en grupos familiares. En las casas se montan simulacros del nacimiento del semidiós; pregonamos nuestra posición social haciendo regalos. En suma, se recrea sin dolor ni sacrificios uno de los mitos fundacionales de nuestra cultura. Incluso si no se comparten las creencias, qué hay de malo en disfrutar de una fiesta con tantos y tan atractivos ingredientes?

Por eso, pásenlo bien en Navidad, no caigan en el consumismo y gocen de los pequeños placeres que sólo se consienten en estos días. Como reza la copla:

Esta noche es Nochebuena y mañana Navidad,
saca la bota, María, que me voy a emborrachar.

Más claro agua. Y mucho me guardaré yo de beberla en fechas tan señaladas. Háganle pues caso al ángel de la historia, pongan un poco de buena voluntad de su parte y mantengan la paz. Que son sólo dos semanas...

boomp3.com

miércoles, 12 de diciembre de 2007

Historias de cronopios y de famas de bolsillo

No es que Historias de Cronopios y de Famas sea un libro grande. Pero ahora, Aguilar, en su colección Crisol, la ha editado en pequeñito, menos que un paquete de tabaco, algo más ancho que un celular (un móvil). Así que ya podemos llevar a cualquier sitio ese libro como lo que realmente es: un inhalador, un broncodilatador del espíritu, un ventolín para las peores respuestas alérgicas. Os diría que no hay excusas para no llevarlo encima, pero el precio me frena: 23 eurazos. Sale más barato comprar ediciones peores y agotarlas hasta poder emular al Cronopio e ir tirando las hojas leídas desde una ventanilla, pero es a pesar de todo, hay que reconocerlo, un formato encantador. Ahora podemos emular a los curitas de tren, con nuestro pequeño libro de oraciones editado en piel oscura, tamaño bolsillo, sólo que nosotros reiremos... otra forma de vivir la espiritualidad.

martes, 11 de diciembre de 2007

Desembarco

Pocas expresiones de las utilizadas en la política española actual son más gráficas que la de "paracaidista" aplicada a aquellos políticos de relumbrón que los partidos envían como cabeceras de listas electorales a provincias con las que no tienen ninguna relación. La certeza de que al menos el primero de la lista siempre sale elegido y la necesidad de asegurarle la poltrona por cuatro años a los miembros de las ejecutivas es la razón de tan singular costumbre, que se cisca en los principios más elementales de la democracia representativa. Por supuesto, semejante fraude está bendecido por la vigente Ley de Partidos Políticos, elaborada, no lo olvidemos, ad hominem con el único fin de poder ilegalizar a las formaciones radicales vascas, pero que ni por asomo roza los peliagudos temas de la financiación o la democracia interna en los partidos que la votaron.

Lo más patético es ver llegar a los candidatos, con sus acentos imposibles y su desconocimiento absoluto del lugar, tratando de convencer a sus posibles votantes de que su mayor ilusión siempre había sido presentarse al congreso por esa lejana provincia, y que si en semejante trance hubieran tenido ellos la opción de decidir, sus madres les habrían parido sin dudarlo en ésta la nueva patria chica de sus amores. Todo ello arropado por las ejecutivas locales que se tragan el sapo en la seguridad de que el partido les reconocerá su sacrificio a la hora de repartir prebendas y beneficios. Y las bases a las que nadie ha consultado, mientras tanto, agitando banderitas y riéndole las gracias a sus líderes. Un espectáculo edificante.

Y luego atribuyen el alejamiento de los ciudadanos de la política a la nefasta influencia de los medios..

lunes, 10 de diciembre de 2007

Se nos fue también Stockhausen


Mientras mis múltiples ocupaciones académicas me mantienen alejado del blog, los acontecimientos dignos de ser comentados se suceden. También las muertes de personalidades del mundo del arte, que merecen al menos un recordatorio. Y aunque no quiero especializarme en oraciones fúnebres en esta ocasión el finado lo merece.

La pasada semana murió Karlheinz Stockhausen, uno de los compositores más influyentes del siglo XX. Tan influyente como para tener el curioso honor de que los Beatles lo hicieran aparecer en la portada del Sgt. Pepper. Y también uno de los más denostados. Para los amantes de la música llamada clásica, Stockhausen es el paradigma del compositor contemporáneo peñazo, creador de sonidos incomprensibles que sólo se justifican como pura provocación. Y no es eso.

Estamos todos de acuerdo en que la música de Stockhausen no es fácil. Y no lo es porque no tiene referentes ni asideros. Stockhausen se propuso inventar la música de nuevo, partir de cero creando algo que no se hubiera hecho antes ni remitiera a nada conocido. Ni siquiera a una pieza suya. Porque no existe un estilo ni un sonido característico de Stockhausen; cada obra es una aventura sonora independiente. Por eso es tan complicado elegir un tema significativo con que cerrar estas exequias.

Así que vamos a escuchar algo sencillo, y es también mi consejo para quienes quieran adentrarse en la música contemporánea. Empezar por piezas que no desagraden, que no sean estridentes, con las que puedas irte a la cama y quedarte dormido. No les demos argumentos a los vecinos para protestar. Y escuchar con la mente abierta, aunque no se entienda. Normalmente este tipo de música parte de un material teórico excesivamente complejo para el profano, pero eso no debe echarnos para atrás. Muy pocos son capaces de comprender lo que quiso decir Bach con El Clave Bien Temperado y sin embargo nos gusta.

Si no tenéis el oído hecho a las sonoridades electrónicas, mejor empezar por piezas para piano o sólo vocales. Como este Stimmung para seis voces, escrito por Stockhausen en 1968. Consta de 51 secciones que duran entre 30 segundos y algo más de cuatro minutos, y pueden escucharse seguidas como una sola composición. Aquí os traemos la sección número 44 en la versión del grupo Singcircle dirigido por Gregory Rose.

Haced un esfuerzo y escuchadla, por el bueno de Karlheinz. Igual hasta os acaba gustando y todo.


boomp3.com

domingo, 9 de diciembre de 2007

Los inextricables caminos de la sabiduría

En la Biblioteca Nacional existe un fondo llamado Comín Colomer que ofrece un amplio catálogo de obras sobre masonería, conteniendo auténticos incunables difíciles de encontrar de otra manera. Sin embargo, pocos de los investigadores que hacen uso de él sabrán como se formó. Una historia que demuestra que los caminos de la sabiduría a veces tienen muchas revueltas.

Eduardo Comín Colomer era un joven que quería ser policía. Intentó ingresar en el cuerpo durante la Segunda República, pero siempre suspendía los exámenes de ingreso. Se dedicó al periodismo en Zaragoza y la Guerra Civil le permitió cumplir su primera vocación. Entró en la policía al servicio de los sublevados y pronto accedió a la siniestra sección política. Tras finalizar el conflicto, pasó al departamento encargado de investigar la Masonería. Uno de sus cometidos fue recorrer España recogiendo documentos de esta y otras organizaciones políticas y sociales proscritas por el nuevo régimen. Se trataba de ver su extensión y sobre todo acceder a listas de afiliados para que cayera sobre ellos la represión. Comín Colomer se aficionó entonces a coleccionar documentos sobre las logias. De las requisas se quedaba con libros y folletos, cuando no directamente documentación primaria. Empezó a su vez a adquirir obras sobre el tema, que en la España de los años 40 eran abundantes, y con el tiempo llegó a conseguir trabajos publicados fuera de nuestro país, bastantes de ellos con sesgo antifranquista. El resultado fue una colección impresionante de volúmenes sobre la masonería y una valiosísima recopilación de documentos incautados en las logias o a los propios masones detenidos.

El tenaz policía destacó además en su profesión por su visión innovadora. Consiguió personalmente introducir en los planes de estudio del cuerpo las técnicas de investigación social, siendo su primer profesor. También rescató su trabajo de periodista y fue escritor sobre los temas que combatía. Publicó entre otros trabajos una historia del comunismo en España y una historia del anarquismo español en varios volúmenes. Otras obras suyas llevan títulos tan sugestivos como Stalin, Gengis Kan Y Pedro I El Grande: planes de invasion de Europa. Comín llegó a comisario y en 1975, tras su muerte, su viuda donó a la Biblioteca Nacional su colección sobre masonería, un fondo de valor incalculable. La paradoja es que ahora los estudiosos podrán saber más sobre esta organización de la mano de un policía reaccionario que la combatió y se obsesionó con ella. Les adjunto un link con más información.

Fondo Comín Colomer



POSDATA
Mientras preparaba este post he visto en el digital de La Voz de Cádiz un artículo sobre la reciente publicación del informe PISA sobre los malos resultados escolares en Andalucía. Creo tiene ideas interesantes y la educación es uno de los pilares que informan a esta panda de concisos ilustrados.

Artículo La Voz

jueves, 6 de diciembre de 2007

Surrealismo

¿Quién dice que esto es lo real?
¿Quién dice que lo que vemos más allá no lo sea?

Leído en una pintada a la entrada de La Caleta. La relación fácil (por lo tanto) está servida, pero yo prefiero otra lectura. A veces se olvida que surrealismo significa "suprarrealismo".

miércoles, 5 de diciembre de 2007

El demonio entre niños

Como recordaran, hace poco tiempo el Papa Ratzi arremetió contra el bueno de Harry Potter. Al inquilino de San Pedro no le molestaba su calidad literaria, sino que a su teológico juicio era una saga bastante anticristiana y que podía hacer creer a los incautos niños que devoran sus aventuras en la magia y en prácticas neopaganas. Ya se sabe que la Iglesia pretende que creamos en cosas tan racionales como conversiones de agua en vino, levitaciones, curas de leprosos y resurrecciones de muertos.

Sin embargo, esta condena papal no está sola. Como podrán ver en el link que les adjunto abajo, la Liga Católica de Estados Unidos ha lanzado su artillería contra La brújula dorada, el film con Nicole Kidman que se estrena en estos días en todo el mundo, y a la trilogía literaria que lo ha basado, acusándola de “promover el ateísmo y denigrar la cristiandad a ojos de los niños", entre otras lindezas. Se ve que ahora se trata de que los niños sólo lean la vida de Santa Benardette y no piensen que pueda haber otra realidad aunque se refugié en el mundo de la fantasía. Lo curioso es que la trilogía lleva unos diez años publicada y hasta ahora que hay película no ha empezado la campaña. Ay, el cine, siempre el cine tan pecaminoso.

Polémica La brújula dorada

martes, 4 de diciembre de 2007

¡Ateos del mundo, uníos!

¿Sabían que existe una Federación Internacional de Ateos? ¿Sabían que en este inminente puente van a celebrar un concilio –así llamado, con un par- en Toledo, ante las integristas narices de Monse Cañizares, el amigo de Ratzinger con el que compartió martillo de herejes en el Santo Oficio?. Pues yo tampoco lo sabía, pero el navegar por internet lleva a estas sorpresas. Para más información pinchen en el link que les dejó abajo. Si clican en el anunció del concilio les sale el programa. La Resistencia tiene más brazos de los que imaginamos. Siéntanse tragacuras durante un ratito.

http://www.federacionatea.org/

lunes, 3 de diciembre de 2007

Cosas de magia

En la Fundación Juan March, en la madrileña calle de Castelló, se encuentra la Biblioteca de Ilusionismo, el mayor fondo bibliográfico de magia y prestidigitación existente en España.

Creada en 1988 con 954 libros y 35 títulos de revistas provenientes de la donación hecha por el coleccionista José Puchol de Montís, en la actualidad cuenta con unos 1.820 libros y 44 revistas que cubren desde el siglo XVIII hasta la actualidad, acerca de juegos, magia con elementos (aros, cigarrillos, naipes, globos...), mentalismo, trabajos manuales, ventriloquia,… y temas generales (bibliografías, diccionarios, catálogos).

Incluye, por ejemplo, el que hasta ahora es el libro español más antiguo de esta materia, Engaños a ojos vistas y diversión de trabajos mundanos, escrito por Pablo Minguet en 1733. Otros libros, como Manuel practique d’illusionnisme et prestidigitation, de Ceillier, Magic for magicians, de Abbott, el Manual del prestidigitador, de K. Honaham, o Juegos de Manos, de Eduardo Wiederkehr “Ediston”, están entre los libros tenidos por básicos para iniciarse en las habilidades del ilusionismo y la magia.

Y en este fondo puede encontrarse Las ciencias enseñadas por medio de juegos, ó teorías científicas… escrita originalmente en inglés, traducida al francés por Richard, y de este idioma al castellano y aumentada por Jorge Lasso de la Vega. Publicado en la Imprenta de Feros, en Cádiz, en 1835. No he indagado aún qué hace este libro en un fondo de magia e ilusionismo.

Jorge Lasso de la Vega, natural de San Fernando, fue brigadier de la Armada y escritor, y está considerado el pionero del periodismo marítimo en España. En 1839 fundó la revista mensual España Marítima, con Manuel Posse y Manuel Montes de Oca, que dejó de editarse al año siguiente. Tomó el relevo en 1841 la Revista Militar Naval, de carácter semanal, también de existencia efímera. Posteriormente, Lasso y Posse se unen para comenzar a editar El Fanal, crónica comercial, marítima, industrial y literaria, que dejó de editarse a finales de 1842. En 1845 prueban suerte con un periódico de marina, geografía y literatura llamado El Marino Español, con idénticos resultados de continuidad. En 1855, en unión de José Marcelino Travieso, Jorge Lasso de la Vega vuelve con Crónica Naval de España que se imprimió hasta 1861; separándose Travieso al poco tiempo para publicar La Marina, una revista con contenidos de carácter militar, mercantil y literario.

Don Jorge Lasso de la Vega fue director del Depósito Hidrográfico, y allí decidió que la Carta de Juan de la Cosa fuese depositada en el Museo Naval de Madrid, donde fue catalogada como sigue:

Núm. 553: "Carta de la parte correspondiente a la América, que levantó el piloto Juan de la Cosa en el segundo viaje del descubridor genovés en 1493, y en la expedición de Alonso de Ojeda en dicho año. Sustraída de España, la poseía el Barón de Walckenaer, cuyos testamentarios la vendieron en pública almoneda; y la adquirió el Depósito Hidrográfico. Su director, que fue el Sr. D. Jorge Lasso de la Vega, tuvo la condescendencia de que se depositase en este Museo, para que el público pueda ver un documento tan curioso y de mérito, con relación a la época en que se hizo.”

Y es que aún hoy día, trabajos como el de Juan de la Cosa nos siguen pareciendo “cosa de magia”, y con ilusión buscamos en nuestra ciudad “el prestigio” otrora desaparecido.

sábado, 1 de diciembre de 2007

¿Qué Mondrian eres tú?




La de arriba es la traducción a arte modrianático de las coordenadas de Duende de los Cafés. Si pinchan aquí, pondrán acceder a un cuestionario que los traducirá también a líneas y colores.

Así cayó Alfonso XIII...

Miguel Maura Gamazo fue el séptimo hijo del político Antonio Maura y Montaner. Con estos antecedentes llevaba la política en los genes. A pesar de su conservadurismo y de su acendrado catolicismo, a fines de los años 20, dándose cuenta de que la monarquía estaba acabada, se pasó al republicanismo. Fue firmante del Pacto de San Sebastian de 1930 y al año siguiente fue ministro de la Gobernación –antecedente del actual Interior- en el gobierno provisional de la República tras el 14 de abril. Sin embargo, su religiosidad no pudo soportar en octubre de 1931 la aprobación del artículo 24 de la constitución que se debatía en las cortes, donde se prohibía la enseñanza a las órdenes religiosas y se disolvía la compañía de Jesús. Maura dimitió y no ocupo cargo alguno en el naciente régimen. En 1935 pudo ser presidente del gobierno, del mismo modo que el 18 de julio de 1936, cuando el presidente Azaña le encargó a la desesperada que formase un gabinete de concentración para intentar frenar la ya irrefrenable sublevación militar. En ambos casos se negó. Maura se había convertido en un miembro de la tercera España. Huyó a Francia, no volviendo hasta 1953. Falleció en el silencio en 1971, a los 84 años.

Sin embargo, tuvo una salida a la luz en 1961. Ese año publicó un éxito de ventas, Así cayó Alfonso XIII..., con esos inquietantes puntos suspensivos. Motivado por un libro anterior donde se ponía a caldo la labor del gobierno provisional, Maura decidió dar a la imprenta sus reflexiones y vivencias en ese período. En mi reciente viaje a Barcelona compré un ejemplar de la 5ª edición, de 1968, en una librería de viejo. Sin embargo, acabo de descubrir vía internet que este año ha salido una edición con el título ligeramente cambiado, Así cayó Alfonso XIII: de una dictadura a otra. Eso sí, el precio de mi viejo ejemplar era infinitamente más barato que el de la nueva.

El libro, estupendamente bien escrito con algún toque deliciosamente anacrónico, es una defensa de la labor del gobierno provisional de la Segunda República y la propia de Maura como ministro. Sobre todo, la justificación de porqué un grupo de prohombres decidió dar carpetazo a la desprestigiada monarquía de Alfonso XIII. No deja de sorprender que esta obra saliese en plena dictadura, por su defensa de los ideales republicanos y por alguna que otra pulla al régimen del Caudillo mandante en esos años.

Traigo a colación esta lectura por lo siguiente. Parece que los debates sobre la Memoria Histórica llevan a la conclusión de que nuestra Historia nace en el aciago 1936, y antes de eso queda mucho por aventar. Como el propio padre de Maura, por ejemplo. Don Antonio era un conservador que se dio cuenta de que había que modernizar la derecha y las estructuras del país, en esa asignatura pendiente que sigue coleando un siglo después. Está claro que Rajoy y sus cuates no han aprendido nada del legado de Don Antonio Maura, que por cierto sólo recibió el odio de la izquierda y el ninguneo de ese rey impresentable al que su hijo Miguel, tal vez su mejor sucesor en lo ideológico, contribuyó a echar. En este declinante 2007 se cumplen cien años del inicio del célebre gobierno largo de Antonio Maura, sin que ese importante período de nuestra historia haya sido recordado o estudiado aprovechando la efemérides, con una historiografía demasiado ocupada en la Guerra Civil para ver más allá.

Y también recupero el libro porque Miguel Maura hace reflexiones en él sobre el “Ser de España”, que dirían los del 98, que casi medio siglo después de ser escritas siguen sonando escalofriantemente modernas. Un solo ejemplo para acabar. “Nuestro sino viene siendo el de ser una nación en perpetuo y agitado período constituyente”