jueves, 22 de noviembre de 2007

El que faltaba

Buenas. Lo malo de abrirse blogs nuevos en vísperas de viajar es que uno se pierde los nacimientos y llega tarde a los bautizos. Pues aquí está el Robespierre Español, dispuesto a usar su guillotina dialéctica e intelectual contra todos los males que nos unen en este rincón. Canismo, falta de valoración del conocimiento y la cultura, etc. Pero hay uno que me obsesiona, y puede ser el hecho diferencial frente al resto de los compañeros. El aumento de la superstición, sea esotérica, budista o integrista católica, que se opone radicalmente a los valores de la ilustración, hoy tan desdichadamente cuestionados. Hay una auténtica campaña. Historiadores o presuntos historiadores –no habló de palanganeros de la derecha como César Vidal, sino de plumas tan brillantes como la de Michael Burleigh- derriban los valores de Diderot y compañía como el origen de todos los males políticos del siglo XX e intentan que este siglo XXI, el de internet y las células madres, se una directamente a las teocracias medievales puenteando todo los valores del XVIII. Frente a esto alzo mi peluca. Saludos a todos.

1 comentario:

Academia de Ociosos dijo...

Ni "last", ni "least". Su discurso hará legión de "afrancesados", Monsieur, cuénteme entre ellos desde ya.